Comparación de los Toro Rosso 2018 y 2019
La pieza es completamente rectangular, no dobla ligeramente hacia afuera como en lo visto en Haas, y el borde inferior acompaña toda la longitud del mismo. Hacen falta sin embargo ciertas piezas, como los reguladores del ángulo de incidencia de los flaps, lo que sugieres que cuando el auto se presente frente al box del equipo en el primer día de pruebas en Barcelona, habrá cambiado este aspecto inicial.
Los triángulos superiores conectan directamente al portamasa, no a una pieza adicional que da más altura a este elemento, una idea que tenía que ver más con lo aerodinámico, que con lo mecánico.
La suspensión delantera también cambia, cortando con la tendencia que en el pasado tanto los de Faenza como Mercedes desarrollaron, levantando el punto de anclaje de los trapecios superiores.
Esto probablemente también tiene que ver con los cambios en los sidepods y las entradas de aire laterales, pues desde ese punto y hacia la parte trasera del STR14 es donde realmente se aprecia la evolución junto a Honda en la forma en la que se ha empacado el motor y todos sus componentes periféricos, ya con una temporada de experiencia de trabajar juntos y conocedores de los requerimientos de refrigeración de la unidad de potencia.
Diferente a las restricciones que impuso McLaren desde el día "zero" a Honda en ese respecto con su concepto aerodinámico, llevándolos a encajar su unidad de potencia dentro del molde de su diseño. Toro Rosso fue mucho más laxo y le dio espacio para respirar al propulsor japonés, algo que para este año, tanto en Faenza como en Milton Keynes, deberían tener ya bastante más desarrollado, algo clave cuando se compite contra rivales que diseñan chasis y motor como uno solo, en el caso tanto de Mercedes, como de Ferrari.
Según ha dicho Jody Egginton, subdirector técnico de la Scuderia Toro Rosso, el STR14 compartirá el "rear-end" con Red Bull, es decir, no solamente la unidad de potencia Honda, sino además la caja de velocidades y componentes de la suspensión trasera. También se espera que usen partes de Red Bull del año pasado.
Aunque esto suena similar a la forma en la que Haas opera con Ferrari, no es exactamente la misma dinámica pues Toro Rosso diseñó su auto y es propiedad intelectual del equipo, aunque si es un hecho que van más en esa dirección de adquirir “partes no listadas” de un tercero, Red Bull Technology, que ahora liga más estrechamente a Toro Rosso con Red Bull en lo técnico, como tal vez ya lo hizo hasta 2010, aprovechando las sinergias generadas por contar la misma propulsión de los de Milton Keynes.
Artículo original: Diego Mejía, Editor General Motorsport.com